El secretario de Minería, Joaquín Aberastain Oro, destacó la relevancia del momento: “Esta resolución significa que el proyecto cumple con todos los estándares requeridos para hacer minería en Río Negro. Es la punta de flecha para el desarrollo minero en la provincia”.

La etapa de construcción está programada para comenzar dentro de los próximos 12 meses, en coordinación con las autoridades locales y las comunidades cercanas. Durante esta fase, se espera la contratación directa de más de 100 personas y la participación de proveedores locales en tareas clave como movimiento de suelos, provisión de materiales y construcción de infraestructura. “Estamos preparando el escenario para que esto suceda de la mejor manera posible, apostando al desarrollo local”, aseguró Aberastain Oro.

El proceso previo a esta aprobación incluyó una audiencia pública en agosto, en la que más de 200 participantes expusieron sus posturas. La instancia reflejó un fuerte respaldo ciudadano al proyecto, destacando la demanda por trabajo y el compromiso con los cuidados ambientales necesarios.

El rol de la Secretaría de Minería será central en las próximas etapas, liderando el control y la fiscalización de los procesos, junto con Ambiente y el Departamento Provincial de Aguas. “Nos aseguraremos de que la empresa cumpla con lo presentado en el informe de impacto ambiental y de que se genere el derrame local prometido”, subrayó el secretario.

Con este avance, Río Negro refuerza su posición como una provincia minera emergente, atrayendo la atención de inversores nacionales e internacionales. “Hoy en día, cuando se habla de las jurisdicciones mineras en otros lugares que visitamos, Río Negro está en el ojo de muchas empresas”, concluyó Aberastain Oro.