
Los informes revelaron que la compañía recluta jóvenes, principalmente mujeres africanas y adolescentes rusos, bajo promesas de empleo en la industria hotelera y formación técnica. Sin embargo, estas promesas se desvanecen al llegar a la Zona Económica Especial de Alabuga, en Tartaristán, donde los trabajadores se ven obligados a ensamblar drones de ataque utilizados en la guerra contra Ucrania.
Los trabajadores superarían las 15 horas diarias, con pausas mínimas y sin pago por horas extra. Entre ellos hay menores de edad, quienes se desempeñan en un clima de extrema presión para alcanzar metas de producción.
Como si fuera poco, la empresa los obliga a firmar acuerdos de confidencialidad que les impiden contar qué tipo de tareas realizan realmente, bajo amenaza de recibir fuertes penalidades económicas.
Alabuga Start utiliza plataformas como Telegram para reclutar a jóvenes mujeres, ofreciéndoles salarios elevados y formación en áreas como programación de drones. Sin embargo, al llegar a Rusia, descubren que su labor consiste en ensamblar drones de ataque en condiciones deplorables.
La invitación a Martín Ku y Nico Grossman
Tal fue el caso de promoción de los ex Gran Hermano que recibieron una invitación en la que ofrecieron una estadía paga: “Soy representante en toda latinoamérica de un proyecto global llamado Alabuga Star. Nos gustaría invitarte a formar parte de este increíble programa grabando un video promocional para YouTube e Instagram en Rusia”, señalaba la invitación.
Según el texto, la promoción trataba de “una iniciativa global diseñada para ofrecer oportunidades laborales a chicas de entre 18 y 22 años que, de otro modo, no las tendrían. Este programa tiene como objetivo formar líderes mundiales”.
Además, el texto aseguraba que el proyecto brindaría a que las “participantes aprendan ruso de manera certificada, reciban entrenamiento en el área de su elección, alojamiento, seguro médico y un sueldo que aumentará cada seis meses a medida que progresen en sus carreras. El programa tiene una duración de 2 años”.
“La empresa cubrirá todos tus gastos durante tu estancia en Rusia, incluyendo boletos de avión, alojamiento y tres comidas diarias”, concluía la invitación a Ku y Grossman.