
“El peso argentino tendrá algún ajuste que llegará de manera gradual o más rápida, sin cepo, con régimen cambiario unificado, y el consenso es que no sucederá antes de las elecciones”, dijo Ernesto Revilla, economista jefe del Citi para América Latina.
El análisis del banco pone el foco en la necesidad de reservas netas positivas para avanzar hacia un esquema de tipo de cambio libreSegún sus estimaciones, se requerirían entre US$ 5.000 y US$ 10.000 millones adicionales para sostener una flotación intervenida. El acuerdo técnico con el Fondo incluye un adelanto de al menos US$ 8.000 millones, aunque el Gobierno pidió más de US$ 10.000 millones.
Ricardo Dessy, director del Citi para el Cono Sur, destacó que un dólar libre permitiría acumular reservas, pero advirtió que una devaluación “innecesaria” podría generar inflación y poner en riesgo el “puente dorado” del Gobierno con sus votantes: la baja sostenida de precios. “El foco debería estar en la cantidad de dólares antes que en el nivel de precio del tipo de cambio”, sostuvo.
El Citi también analizó el impacto global de la guerra comercial de Trump y apuntó que América Latina está bien posicionada frente a un dólar débil. Aunque Argentina es menos vulnerable por su bajo nivel de comercio con EE.UU., sigue siendo afectada por la incertidumbre y la escasa profundidad de su mercado financiero. “Ahí es donde nos pega fuerte”, señaló Dessy.