El episodio fue registrado en un video casero, que se incorporó como prueba clave en la investigación. La evidencia fue respaldada por la denuncia penal presentada por la madre de la niña, así como por certificados médicos que acreditan las lesiones, entre otros documentos.

Según la acusación, el hecho ocurrió entre el 15 y el 17 de marzo en la vivienda que el hombre compartía con su hija y su pareja. Tras conocerse la situación, la Secretaría de Niñez, Adolescencia y Familia intervino de inmediato, resguardando a la menor y separándola de su padre.

Medidas cautelares y protección judicial

La Jueza de Garantías dispuso una serie de medidas cautelares:

• Prohibición de acercamiento y contacto del imputado con la niña, directa o indirectamente.

• Restricción de acceso al domicilio en el que la menor reside de forma provisoria.

• Obligación de presentarse tres veces por semana en una comisaría.

Estas acciones buscan resguardar la investigación penal preparatoria y asegurar que el imputado permanezca a derecho.

En paralelo, el fuero de Familia de Cipolletti dictó una medida protectiva por la exposición de la niña en redes sociales, debido a la vulneración de su privacidad e intimidad. El juez interviniente recordó que, ante cualquier conflicto, debe prevalecer el interés superior del niño por sobre otras garantías, como la libertad de expresión.